Los caminos de Compostela atraviesan regiones diferentes con microclimas particulares muy difíciles de prever. Si las tendencias climáticas permiten hacerse una idea del tiempo que hará, el peregrino no está exento de sorpresas y de fenómenos meteorológicos imprevistos. Es el caso por ejemplo de regiones como los Pirineos o Aubrac, donde puede nevar ¡en pleno verano!
En cualquier caso, es necesario informarse sobre las condiciones meteorológicas en cada etapa y equiparse bien contra el frío, la humedad y el calor.
Para los itinerarios franceses, se recomienda salir en primavera o en otoño para evitar el frío, la nieve, la lluvia en invierno, y el calor, la gente y los establecimientos completos en verano.
En cuanto a los itinerarios españoles, se recomienda evitar el verano por las olas de calor en algunas partes del Camino Francés. Sino, se recomienda adaptar el ritmo al que se camina: salir temprano por la maña y llegar antes de las dos de la tarde, para evitar el calor. En cualquier caso, el Camino Francés sigue muy frecuentado de abril a principios de octubre.
En cualquier estación, al franquear una colina uno puede encontrarse con nieve, lluvia, tormentas o bancos de niebla.
En Francia, los puntos delicados son :
En España, los puntos delicados son :
En caso de niebla o de riesgo de nieve, se debe aplazar la salida o seguir la red viaria, evitando los senderos.
Se recomienda pedir información al gerente del alojamiento o a la oficina de turismo antes de cada salida. Es imperativo respectar las señas de prohibido el paso. ¡De lo contrario el camino puede resultar extremadamente peligroso!
Para conocer el tiempo de una ciudad-etapa en Francia o en la Península Ibérica, consulte la página web www.meteofrance-com y seleccione la ciudad que le interesa.